NOS LO INVENTAMOS TODO
de A. GINSBERG, K. KOCH y R. PADGETT
Ed Kriller71
Versión de Sílvia Galup
KK- Vamos a hacer algo relajante
AG- Un poema que no tenga sentido
KK – Vamos a hacer un collage ¿has traído algún libro?
AG- Sí
KK- Perfecto ¿qué has traído?
AG-He traído el sueño ¿puedo usarlo?
He leído el libro.. a ver...: en silencio, con música de 13th floor elevators, en silencio otra vez, en voz alta… y...decidí que tenía que leerlo en voz alta, está hecho para ello, desde su origen hasta en sus palabras dictadas, cantadas, pausadas, improvisadas o, simplemente, ilógicas..
Este libro hay que leerlo en voz alta. Sí.
Llegado
al punto de conocerme el libro bien, me decido a hablar sobre él, no a hacer un
reseña puesto que esto no es una reseña, no sé hacer reseñas, que según alguna
profesora de crítica literaria mexicana que conocí deben ser limpias,
objetivas, abstenerte de ideas
propias, y de polvo y paja; así que no sé hacerlo. Además me pasa que en un
giro solipsista o introspectivo -a saber- del libro, aparece en él la mejor definición, la decisiva, la que el libro se describe
a sí mismo. Sí, en efecto, la solución está en sus páginas.En esta marmita –en la que debí caer de pequeño, pero no pude
por no conocerlo- que recoge una reunión en una iglesia; lugar, digámoslo, donde no encaja este frenesí
de textos con, a ver, ideas sexuales y muchas libertarias y metafóricas, y absurdas
y bellas y carnales, y alguna descreída, -solo encaja, en lo del suceder en una iglesia, este aire de cadáver exquisito y en lo sagrado-; desencaja, también, en esta sopa,la orgía desnaturalizada entre componentes de la Escuela de New York y los
beat; y desencaja ese jolgorio descrito de la
gente jaleando, y que la suma de las partes no son el conjunto, y esa extraña grabación en,
supongo, un viejo grabador que sobrevive por los pelos. Decía, en fin, que la definición última del libro, admiren lo retorcido, está en una
entrevista que hace
Ginsberg a Koch, en el que este se define, o define una obra suya, una obra de teatro, citando una crítica artística que hace Frank O’Hara a la obra de un
escultor, Smith tiene de nombre. Así es
la literatura…
….
-Páginas 115 y 116-
Kenneth Koch.-Prefería contarte la trama superficial
Allen Ginsberg-¿Por qué?
Kenneth Koch- Porque esa es la trama. No hay significado oculto:
Frank O’Hara dijo algo sobre el trabajo de David Smith que parece relevante
para lo que pretendía fuera mi obra. En las esculturas de acero de Smith, Dijo
O’Hara, la unificación se aborda invitando al ojo a viajar exhaustivamente
sobre la compleja superficie, en lugar de invitarlo a establecerse en el todo y
luego explorar ciertos detalles.
….
Y ya está…
...El libro es eso...es leer, observar, improvisar, acariciar, absorber, improvisar, limar, lucir, improvisar, declamar, oler, improvisar... No pretendas buscar una razón oculta y encontrar las pruebas, simplemente es esto… Es esta sensación de libertad, juego, de pensamiento rápido, birlibirloque de palabras, improvisación -insisto-, imaginación, color, luz, oscuridad, sentido, pasado-para nosotros-, presente -para ellos- , es solicitud , energía-mucha- , sinergia, solipsismo, sarcasmo, ironía, bendición rápida, anatema, exactitud, texto salvado y bombas al aire que explotan dejando heridos; nada más rápido y directo-acción directa-. Es esto. Ni más ni menos: es una exhibición de Orfeos sin lira, una descastada reunión de poetas sin permiso divino., es un desorden organizado, una energía nacida de la cuidada, contradictóriamente, entropía -amo, sobre todo, este libro porque es un libro entrópico-.
Versos de unos norteamericanos compañeros, eruditos colaboradores, de
bertsolaris, de repentistas, de payadores , de remedos de improvisadores,
también, del Stornello.
…
AG- Con barba el joven se inclina
hacia adelante
KK-Como una rana
AG- Escuchando a los poetas croar.
….
Pero me queda corto esre comentario, de modo que comento
algo que me ha venido a la cabeza mientras lo leía, alguna de las veces, y es
lo efímero del arte, más en este caso con desaparición inmediata por improvisado; la plausible (y cierta en otros casos) posibilidad de que esto no hubiera sido grabado;
esa extraña sensación que deja el arte
que desaparece y que tú no puedas haberlo visto u oído o sentido. Esa sensación
que me obsesiona desde niño con la pérdida de obras de la biblioteca de Alejandría o
Montecassino,
(perdón, pero pongo otro cachito del
libro)
KK-a veces siento que no soy nadie
AG-a veces siento que no soy nadie
KK- sentado al lado del teléfono
esperando que alguien llame
AG. Solo soy un pobre mendigo, que
quisiera ser más rico que Rockefeller
(sigo)o los cuadros perdidos de Tiziano, Ribera o Rubens o ….
Y… ¿sí esta reunión o asamblea o
exhibición poética no se hubiera grabado? Si fuese así sería parte de la
leyenda perdida, sería parte de esa cada vez más grande perdida de arte en
el mundo, esa sensación de que lo hermoso dura cada vez menos, de la posibilidad
de olvido perpetuo y, es más, en el mundo actual …de desprecio. Supongo que,
tomando en serio a Einstein, y creyendo aquello de que la energía ni se crea ni se destruye,
creo que esta reunión poética nos hubiera debido llegar, porque creo que todos
esos otros poemas perdidos por no haber
sido grabados, escritos, las canciones nunca grabadas, los solos de piano nunca
descritos, los cuadros quemados, hasta las miradas de cariño que nunca nadie ha
contado… toda esa belleza que no nos ha llegado..,
toda, sí… debe, seguro, estar en el viento, de Dylan o nuestro, y nos llegará
de ella alguna parte infinitesimal si somos conscientes de ello, y si escuchamos
con cuidado a la brisa, cuando es suave.
…
-AG- Popeye se sentó en una silla
KK-Leyendo a William Blake
AG-Blake se levanta y grita
KK-¡Este marinero no es de ley!
….
Me viene a la cabeza otro asunto que me surgió con la lectura,
espero, atenta de libro, -las veces deberían convalidar-, y es ese asunto de la propia belleza. Todos, desde los filósofos hasta los
artistas de moda incluidos, han hablado o disertado sobre la definición, esa tontería de la objetivación de la belleza; con intentona
de definición o exageración o de dogma- siempre hay de todo…-. No quisiera, encima, caer yo en el dogma y crear un catecismo, una biblia en el peor de los casos,
afirmando lo que es belleza o no. Este libro, para mi concepto de belleza, es
bello, con todos los peros que me pondría el mundo, incluido Robert Frost y hasta Bill Murray, sobre
lo que se pierde en la traducción, sobre la vida y
milagros de los versos ingleses y la pérdida de valor de la imagen -sin
la alta definición del idioma-. Pero, así es, el libro es bello para mí, la
razón será tan propia como impropia para otra gente, este so sí, partiendo de que este mundo
absurdo de lo correcto y lo políticamente correcto, y lo políticamente correcto
por censura, y lo políticamente correcto por censura y por papanatismo, me supera
(de tal forma que lo obvio)-. Decía que este libro me parece hermoso, ¿por qué?
Pura
(aquí otro pedazo de página)
AG -¡Qué miedo! No sé cómo hacer que mi sextina tenga gracia
KK-Allen tendrías que abandonar por
un momento tu espiritualidad
AG-Eso parece, bueno Ken, y sin
embargo
KK-Si hicieras algo así en la Escuela
de New York serías un intruso
AG-Aunque de todas formas me cerrarían
la puerta en la jeta
KK-Allen, si piensas eso, debes
estar soñando
AG-Bueno, Ken, sabes que soy un
poeta y siempre estoy soñando
…..
(sigo..)exposición de ideas, de servicios al arte, de
desarrollos exponenciales de la imaginación, de momentos….Supongo que son eso
en realidad: los momentos; esos textos creados en un momento dado imaginados e inimaginables, en un
sito dado, en una cultura dada, en un contexto dado, con unos protagonistas
dados, improvisados y eternos, que rompen con todo y se dedican a crear, con ideas originales o no, eso
da igual-no lo podemos analizar así-, donde
aparece un instante maravilloso de una o dos horas, esa fragilidad de la belleza, de lo que decía antes: lo efímero, improvisado y distinto. Lo atrapado que debe ser lo hermoso
para que no se escape, y da igual que no lo entiendas, que se te escape, es el
momento y su reflejo en ti, ese orgasmo de versos e ideas, esa explosión no ya de ganas, sino de empujarte a pensar distinto,
a mirar cosas nuevas, a sajar este mundo por la mitad y crear algo nuevo fuera
del papanatismo, ese, que nos rodea. Y
si, ese es un lado, el texto y sus autores, en el otro, luego, está el oyente, en este caso yo, el lector,
quizá el que decide sobre todo: leer,
entender, comprar, distinguir, apreciar, subir al carro, descarrilar el tren,
bueno…el lector es quien decide creer en lo que lee…y este libro es para
creyentes, es un libro para un tipo de secta atea y agnóstica y fastidiosa e
irreverente, que cree que la vida no empezó con internet y que los raros no son
los malos, que los poetas hay veces que son buenos, y que el coyote debe
algún día tirar atado por la azotea del Empire State, aunque no se lo coma, al
correcaminos, y que la vida, como en este libro, consta de pequeños y extraños
momentos de belleza que hay que aprovechar...
…-
AG-Bueno aprendí sobe metáforas en
la universidad de Columbia, pero fue hace tanto que ya se me ha olvidado.
KK-Nunca olvidó nada
AG-Dios
KK. ¿Qué Dios?
AG-Ninguno querido
KK-Querido Ninguno
….
Adjetivos… quería hablar por último de los adjetivos. Supongo que pensarán, si alguien -que lo dudo- ha llegado por aquí, que qué hago hablando de los adjetivos de este libro: pues es simple, me vino a la cabeza una notita que dejó Sylvia Plath en uno de sus diarios, en la que hablaba de que estaba enfadada y obsesionada( raro es) porque en los poemas últimos suyos que había revisado, abundaban en demasía los adjetivos( hablaba de que esa no quería que fuese su poesía) Así que, como admiro –quiero- a Sylvia, siempre , las escasas veces que lo hacen, que me preguntan que qué es la poesía bella para mí, yo , sin sacralizar, respondo que la poesía bella es la que economiza los adjetivos (la sobreabundancia de calificativos me puede), la que va directamente al verbo y sustantivo; la que cita, ejemplariza, dota al asunto, a la imagen y la vida de un cosa objetiva, directa, sin escapes, sin fuegos de artificio. En este libro, esta charla, esta reunión, escasean los adjetivos,-fíjense-, sus definiciones son directas, al ojo, al corazón, a la sangre, a la herida o a hacer herida o a hacer concepto sin definir; y tú defines -debes, deberías-. Sin adjetivos hay sustantivos sin santificar, verbos sin el color exacto... hacer del texto una colección de ideas a discernir, a copiar. Sangrar los textos al modo del viejo médico, lo hacía para liberar la mente ( y para expulsar los males del corazón y la angustia, pero eso es otra historia).
Postdata: si Ordine defiende la "utilidad de lo inútil", yo creo en la utilidad de lo efímero( y como tal inútil) en la vigencia de lo hermoso, porque como tal ha de tomarse todo el ritual de leer poesía: el gesto de aceptar y conseguir él libro, el acto de leerlo, el propio hecho de descifrar y adaptar el texto y su complejidad , recoger la profundidad o expresión de sus significados; todo, todo, es un acto de amor a lo no evidente, a lo extravagante, a lo necesariamente innecesario; por lo tanto es el amor a lo último nuestro que nos va quedando: la libertad, la libertad de amar lo diferente, a la mirada distinta a la vida, al mundo.
…
AG- En el balcón
KK-Julieta vomitando
AG- Dice que Allen escribiría sobre
esto…
….
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