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martes, noviembre 15, 2016

LA TIERRA MURMURA EN SÍ BEMOL de MARI STRACHAN

LA TIERRA MURMURA EN SÍ BEMOL de MARI STRACHAN
the earth hums mi b flat 2009
Edt. Espasa Pág: 335
Trd isabel Murillo Fort




Caminar con pasos quedos para no molestar a nadie, para que no se note que has estado allí, que has pasado por sus páginas, silencioso el respeto por las cosas contadas, por ese minúsculo pedazo de cielo incrustado entre tapas blandas, respeto para esta nube que descarga agua en un desierto inmenso,  respeto para este hermoso traje visible entretejido con agujas de coser como las que usaba mi abuela para tejer mis calcetines gordos y torcidos con los que me alzaba del resto del mundo -de los mundos-, y con las que mi abuela me hacía el truco, que yo pedía todos los días con insistencia, de parecer que se metía toda aquella aguja de calceta por el oído y sacarlo como por arte de magia, ilusionismo que yo aplaudía, y que es, todavía, tan mágico como solo lo pueden ser las experiencias de niño, como cuando inventaba mundos donde no los había, o donde inventaba crueles emboscadas con soldados de plástico en los pliegues de las sábanas, o habitaban fantasmas en las puertas cerradas, o era un hechizo la caída de la nieve que parecía, si la mirabas fijamente, que te hacía volar, ascender hacía el cielo y fundirte en aquella sopa de harina y tapioca que caía y caía y te rodeaba, hasta que tu abuela te llamaba para que probaras la bufanda que había tejido en verano y que llegaba hasta el suelo, y te picaba como mil demonios, hasta que la aguja desaparecía en el oído y... nada pasaba, solo magia. Los pulsos del corazón de aquella época de imaginación y descubrimiento, de fascinación y de credulidad, donde todo parecía posible, hasta parecía que íbamos a ser otros de los que hemos sido; ese golpe olvidado del corazón que se aceleraba al ritmo de la ilusión y de las cosas nuevas que descubría, se me ha aparecido otra vez leyendo “La tierra murmura en sí bemol”. No es un libro infantil, no es un libro que cuente historias fáciles, pero sí habla desde la mente de una niña, Gwenni, que camina por el mundo a veces con pasos silenciosos -en casa-, otras veces pasos que vuelan, pasos que aunque no se elevan algún día lo harán y la elevarán por el cielo, como lo hizo, ella lo recuerda, cuando era pequeña agarrada a las manos de sus padres, que la elevaron más allá de las nubes y voló, por cirros y cielos; ahora solo lo hace en sueños, encerrada en las cuatro paredes de su habitación, parece salir del mundo y ver todos los rincones del paisaje, de su pequeño y cerrado espacio de vida. Allá en un pueblecito de Gales, donde todo nace y acaba.

La familia de Gwenni, tiene tantos secretos como los tiene toda las familias del pueblo; además,  su padre que no para de trabajar, su madre que parece que no la soporta, su hermana que se va haciendo mayor y la ve pequeña e inútil, su abuela que la enseña a ser ella misma; y está la familia Evans a la que adora, bueno adora a las dos pequeñas a y a la culta y atractiva madre, al padre no, porque es, para ella, aborrecible; su mejor amiga, Alwenna, con la que descubre cosas y nuevas ideas; los chicos de su edad a los que desprecía por malos e insoportables; y los libros, todos los libros que puede leer, los lee, especialmente los de detectives con los que descubrir asesinos o buscar huidos. Hasta que un día desaparece aquel espantoso marido de la señora Evans, Ifan. Entonces algo cambia, el precario equilibrio de un universo sujetado con silencios o cosas contadas al oído que estabilizan sus patas, parece haber perdido su apoyo, cojea y golpea el suelo, destartalado,  con cada descubrimiento de Gweeni:  las cosas que no se dicen pero se saben, las cosas que se dicen y no se saben, las personas que hablan de ellas y de los demás como si fueran ellos, los pasados que invaden el presente, el presente que parece que ha sido siempre pasado. Ella interpreta el mundo desde su mirada infantil, y en él van apareciendo un sinfín de personajes que pueblan aquel microcosmos: locos, policías, hombres sabios, madres insoportables, abuelas calladas, niñas amables, diáconos tímidos, señora que cocinan muy mal, perdidos que no vuelven... Ella pretende investigar un mundo desde el punto de vista infantil, desde su mirada de niña, y se encuentra con un mundo adulto: sucio, cruel, insoportable, que no reconoce en su inocencia. Y, aún así, quiere salvarlo, desde su imaginación y su verdad, quiere salvarlo. Salvar la pintura de la cocina que parecen bocas que hablan que parecen decirle cosas hasta que su padre las pinta y que se ahogan debajo de la nueva pintura, o las tazas sobre la alacena de la sala de su casa que parecen curiosear la vida cotidiana de la familia; o las miradas de un zorro que ocupa el cuello de una señora y le pide ser enterrado lejos de su tristeza, y salvar a sus amigas, y a la gente que quiere, y a su padre y a...

Hay cosas que me provocan agitación, que aprecio como lector y veo que, por encima de lo relativamente desconocido de la novela, hacen que sea una lectura especial. Así, la combinación de la mirada infantil, con la temática adulta; la creación de la belleza de la mirada poética, de las imágenes imaginativas, son de un extraño atractivo casi posesivo, casi obsesivo; las ideas que crean las palabras, con la mezcla de mensajes y ternura que desprenden sus letras, son tan profundas que su unión hace fundirse y suavizar, superar, los momentos que aparece lo cruelmente extraño y las posibilidades menos agradables, los descubrimientos que hubieron debido olvidarse pero que el azar y la obligación saca como puntas de clavo de la madera podrida, esos que hacen daño y sangre cuando los pisas: la imposibilidad de relacionar amor y odio maternal para con su familia, o del pueblo para con sus habitantes, o del marido para con su mujer, o de la esposa con su marido, las implacables viejas historias que no han podido olvidarse... Todo ello, mirado desde la mirada inocente de una niña, crea una sensación extraña, de escalofrió triste, que parece despertar una ternura para con el personaje, que, a pesar de todo, no parece desvalido; está protegido por su carácter, por su lógica aplastante,  por sus sueños, por su desbordante imaginación y por una parte de la familia;  que parecen descubrir un ser mágico , cuyos  pies algún día volarán, y partirán de aquel pueblo donde todo parece uniforme, donde nada es secreto, todo es cuadrado, todo es frontera cerrada.


La gente diferente, la que vuela, la que se imagina sueños, la que vive más de una vida, la que mira las cosas de muchas formas, la que sabe que el mundo no siempre será igual, la que no cae al primer embate de la tempestad porque no se rinde, esa gente siempre será la extraña para la multitud, la que es rechazada, la que se aparta, pero termina elevándose sobre las nubes, batiendo las alas para salvar riscos y no caer en pantanos. Gwenni trepa sobre una roca, sobre lo más duro del mundo, para volar, alzarse, y volar...Porque sabe la verdad de las cosas y no le da miedo...

wineruda

viernes, junio 24, 2016

EL ENCIERRO DE LAS BESTIAS de MAGNUS MILLS






















EL ENCIERRO DE LAS BESTIAS de MAGNUS MILLS
The restraint of beasts 1998
Ed Círculo de Lectores 183 Pág
Trad, Mariano Antolín Rato






El otro día escuchaba una canción en la radio, no recuerdo si era una versión o una original, y se notaba que estaba todo bien planeado y ejecutado, probablemente con la perfección de la informática. La mujer que cantaba tenía buena voz, y el conjunto era aseado y técnicamente bueno. Pero... era algo sin alma, anémicamente vació, una sucesión de notas huecas de sentido, como un fuelle tocando un saxofón o una vaca tocando el tambor con la cola. Inercia, pura inercia. Una cantante que quería ganar dinero sin dar nada a cambio. “El encierro de las bestias” tiene algo de aquello -bien ejecutado y planeado...- y, en apariencia, algo de nota hueca, de fuelle tocando el saxofón. Pero no, no es cierto, eso es solo la forma exterior; el libro tiene espíritu y entrañas. Notas, en el reverso de lo que parece poner, que algo bulle entre sus páginas. Sus textos embutidos en una simpleza fingida, destilan malvada ironía, de humor crudo sin añadidos. Imagínate que oyes un adagio que suena triste y tranquilo, tu mente comienza a huir a sitios lejanos, pero, de repente, un estruendo rápido y contundente, agita la melodía apenas un segundo, asaltando tus pensamientos y acelerando el corazón, “El encierro de las bestias” tiene algo de eso, pero como sin mala intención, como si el estruendo era algo que lo provocaron las circunstancias mientras pasaban por tu lado.


El libro es la historia de la monótona vida de unos colocadores de cercas para ganado que trabajan para una empresa escocesa. Ellos, dos jóvenes desarrapados y descuidados escoceses y un encargado inglés, se van moviendo por diferentes lugares haciendo su trabajo, hasta que les encargan un trabajo en un pueblo del sur, en Inglaterra. Allí les tocará colocar la cerca en un pueblo aburrido, donde beber cerveza, gastando todo su dinero, y mirar las pocas chicas que se mueven por los pubs, es su única forma de vida ajena al trabajo; iba a decir diversión, pero no sería la palabra correcta, porque ellos se movían por impulsos rudimentarios: comer, fumar, beber, trabajar, volver a beber y dormir. No ganaban para vivir y, tampoco, vivían para ganar. La rueda giraba inalterable todos los días, iguales hasta en lo distinto: así, la muerte les irá acompañando por sus trabajos de una manera inconsciente, casi inalterable, como si fuera la razón de la existencia, o, al menos, algo inherente a la labor que les ha sido encomendada.


Desde los tres protagonistas, hasta la legión de personajes que aparecen en sus aledaños, todos, tendrán una manera de mirar al mundo casi circunspecta, grave, a la manera de un Buster Keaton moderno, al que la vida no parece ni rozarle, y, si lo hace, no afectará a su ánimo ni a su templanza. Las más graves o las mas tontas de las circunstancias no tienen diferencia, asaltan sus dudas de la misma manera: es lo mismo un corcho en el suelo que un cadáver en el patio. Por lo tanto, la única conclusión posible que da esta descripción del libro, sí, es que es un festín de humor negro, oscuro como la boca abierta de un muerto, como la noche inglesa cuando cierran los pubs y se acaba el mundo. Toneladas de mal genio abarrotan los textos, hasta la vulgar mirada de un perro o la palabra intencionadamente inocente del escritor remite, más tarde, a una imagen o situación que no se espera. La totalidad del libro es, en realidad, una patada en el culo de la condición británica de ver el mundo, de pasear sus miserias, de sus trabajos mal pagados, de sus relaciones personales vacías, de sus mundos aburridos. ¿Condición solo británica? Pues no... la globalización nos lleva, como borregos hacia el matadero, hacia el interior de las cercas electrificadas para bestias que van apareciendo; sean con forma de televisión, de periódico, de bar, de campo de fútbol, de música cenicienta, de sueldos flacos, de pan, agua y circo.

Como un sueño tras una noche de desenfreno de alcohol, esas que el vapor etílico de tu propio sudor todavía emborracha, ese que es víspera de una resaca pastosa; este libro es una pesadilla de las que repites tu vida, una y otra vez, pero, en las pequeñas cosas, en las más nimias, es donde vas a descubrir la realidad de tu vida, la interpretación de tus comportamientos, el resultado final de lo que has hecho. Leer este libro acechando cada detalle, hasta el que te parezca inservible, es la manera de adentrarte en la historia que cuenta, conocer todos los matices, los dobles sentidos, y comprender todas sus maledicencias para con sus personajes. Para, en pocas palabras, reírte de todos y de todo.

Wineruda





domingo, abril 19, 2015

LA LIBRERIA de PENELOPE FITZGERALD





















LA LIBRERIA de PENELOPE FITZGERALD
The bookshop 1978
Edt. Impedimenta. 191 Pág



Cuando leo una novela de fácil lectura y no demasiado tamaño, siempre acepto el peligro de leerla deprisa, como si de un tenue soplo se tratara, y acabar con la impresión de haber dejado algo por el camino, no haberla suficientemente desmenuzado por la propia inercia de la lectura. Así que asiento el paso, freno mis ojos, y dejo que no sean los sentidos la que la analicen. Y me paro a reflexionar sobre lo leído una vez acabado el libro. Cierto es que se hace siempre, pero es esencial en el caso de este tipo de libros que desde su apariencia de inofensivos retratos de una ciudad, unas personas o unos momentos más o menos exóticos, más o menos amables, más o menos típicos, esconden, socavados, pozos de agua estancada, con ese salitre que corroe las construcciones, los acantilados y las almas inexorablemente.

Penelope Fitzgerald no habla, aunque parezca lo contrario, de libros o literatura en esta novela, se llama “La Librería” como podría haberse llamado “La sastrería"” o “ La Licorería” o “ El Colmado” las referencias literarias o acerca de libros no variarían el recorrido de la historia, nada que aportan esos temas haría diferente esta novela. Habla de otras cosas: de mezquindad, del clasismo imperante todavía en la sociedad inglesa -que supura por todos las heridas de la comunidad-, habla de cierta inexorabilidad de los acontecimientos para ciertos tipos de personas esa sociedad, de lo limitado que es el horizonte para una parte de los habitantes de ese pueblo, pero también habla, por contraposición, del coraje, de las ganas de vivir o de intentar aprender a sobrevivir con lo que se tiene entre las manos.

El recorrido de la novela por los ambientes y paisajes del libro, te hacen recordar viejas novelas inglesas sobre pintorescos pueblecitos marineros, donde las gaviotas, las olas, las casitas cerradas, los hoscos acantilados, largas playas, sus días lluviosos, su color gris, hasta su poltergeist de andar por casa, parecen dibujar un paisaje casi de postal de vacaciones, pero detrás esconde una ciudad encerrada en sí misma, donde el mar va devorando centímetro a centímetros sus costas, donde las personas son hurañas, donde parece que no ha pasado el tiempo y no parece que quieran que lo haga, donde parece que están aislados mental y geográficamente del resto del mundo. Y aunque pudiera parecer que la autora sólo utiliza la ironía -que lo hace en abundancia- lo que refleja es un mundo triste, desesperanzado, corto de miras y apático.

Los personajes están esbozados como si fueran parte de una pintura impresionista, pequeñas pinceladas, dibujan la personalidad de los habitantes del pueblo, pequeños puntos de colores, a veces brillantes y otros oscuros, configuran, claramente, los rasgos definitorios de su comportamiento. Hasta los diálogos son cortos, casi cortantes, para reflejar muchas cosas en pequeño espacio; con pocos elementos se define la totalidad. Así todo pasa rápidamente, casi bruscamente, y cada cosa que cuenta lo hace con el ahorro, casi la frugalidad, del que sabe lo que quiere contar y no necesita más espacio.

La historia, en sí, es simple: Florence Green una mujer solitaria de mediana edad, decide comprar un edificio histórico, para convertirlo en una librería. La dificultad es que un pueblo pequeño, donde las personas no alteran sus vidas por nada, a no ser que seas la mujer más rica del pueblo, que pretende que las cosas sucedan como ella quiere. Algunas personas la ayudaran, otras la zancadillearan, pero el camino, para ella, seguirá adelante.


wineruda

viernes, abril 10, 2015

MI HERMANO STANLEY de JENNY DISKI





















MI HERMANO STANLEY de JENNY DISKI
The vanishing princess 1995
Edit. Circe 250 Pág.
Tradc. Gian Castelli Gair



Sorprendentemente buena colección de historias; pero esa sensación de inesperado lo es por el desconocimiento de esta autora, al menos para mí, y por la calidad de sus historias, por la combinación de reflexión, imaginación, observación, por saber rascar la superficie de la piel humana y encontrar entres sus venas las conexiones con mundos propios en ese espacio que permanece entre lo cotidiano y lo insólito, por sobreponerse a la comodidad de un relato común y adentrarse en las mentes de los personajes hasta vaciarlos delante de tus ojos, desnudarlos, para mostrar sus cuerpos, también, resueltos a actuar como son ellos en realidad, o como quisieran ser; también por transformar los cuentos de príncipes y princesas en relatos, entre irónicos e indómitos, en historias que se adentran en esas historias de niños para, de repente convertirlo en algo para y con adultos.


Son 12 relatos sobre mujeres, sus personajes principales son femeninos, son las que cuentan sus dudas, las que revelan sus necesidades, sus complejos, sus anhelos, sus perdidas, sus patologías, sus contradicciones, su resolución, su búsqueda... Sean en matrimonios frustrados o felices, sea en torres abandonadas o palacios viciados, sea en paraísos silvestres o en sórdidas casas, sea en relaciones esporádicas o en amores eternos, sea sobre añorados u odiados días infantiles, sea siendo engañadas o siendo las que engañan, las que ríen o lloran, con padres odiados o queridos. Son, casi todas, historias sobre la meditación y la introspección en sus actitudes, en su pasado, en sus relaciones, en su manera de actuar. Eso no significa que sean cuentos pesados o extremadamente profundos, son relatos a veces irónicos,a veces con sorna, otras veces tristes o que te hacen pensar , otras veces son como un concierto de heavy metal en la Abadia de Westminster, que te descolocan y sonríes con comprensible aturdimiento de sorpresa.

La voz narradora emite, en casi todos sus relatos, una oración común; esa necesidad de ser comprendidos y comprender -acciones, palabras, hechos, pensamientos-y aunque sea exagerado decir que en todos aparece esa misma voz, sí que comparten, como es lógico, un mundo común donde muchas veces el sexo, la infelicidad, la fidelidad -y lo contrario-, la añoranza de una infancia más feliz, , la insatisfacción, o el desengaño del simple discurrir de la vida inesperadamente distinta a lo que se había creído, comparten en muchos casos páginas en este libro. Donde sus protagonistas, exceptuando las princesas y alguna jovencita, son mujeres ya no del todo jóvenes, trabajadoras, casi acomodadas, y que hacen lo que podría decirse como una vida convencional pero...


Hay muchos cuentos que merecen mucho la pena en este libro, pero no podría hacer un comentario sobre él sino nombrara uno en concreto que me ha dejado impactado, por sus temática, por como está escrito y por que es bueno hasta para leerlo varias veces seguidas, se titula “el saltavías”, y por favor, si tienes la oportunidad, no dejes de leerlo puesto que no estorbaría en una antología de los mejores relatos del siglo XX. Claro está que es una opinión nada más, de alguien que evidentemente no ha leído tanto como para osar decir esa afirmación , pero ¡qué puñetas! Como autor de esta reseña me reservo el derecho a aclamar que este cuento sera  uno de los mejores que  leereís  nunca, o casi...

wineruda


miércoles, marzo 25, 2015

UN PINTOR DE HOY de JOHN BERGER




















UN PINTOR DE HOY de JOHN BERGER
a painter of our time 1958
de. Alfaguara. 311 Pág.
Traducción: Pilar Vázquez

La existencia del pintor exiliado húngaro Janos Lavin , ya cerca de los sesenta años, cambia el mismo día que encuentra el éxito de su obra en una exposición ; simplemente desaparece del Londres donde vive, abandona su vida normal, su mujer , sus amigos, su taller de pintura y no queda rastro de nada suyo por las calles, casas, brazos o voces cruzadas entre las que sobrevivía. Aparentemente es el inicio de una reseña de una novela de misterio: cierta intriga, un poquito de investigación y unas gotas de suspense y se completa una novela policíaca al uso. Nada más lejos de la realidad de este libro, es la antítesis de una novela negra. Es el diario de Janos con notas al margen explicativas del narrador de la historia -su amigo John- sobre lo que sucedió en los costados de lo que contaba, y, entre otras cosas, una apasionante clase magistral sobre lo que es el arte en todas y cada una de sus facetas -creativas, comerciales, morales, técnicas, pasionales...- una reflexión sobre la creación y el artista, una descripción meticulosa sobre cómo es el pintar un cuadro, un atlas sobre el conocimiento teórico y práctico de la pintura.



Berger pinta un paisaje con figuras, en él combina valores enfrentados: la conciencia de un autoexiliado en un país extraño, la vida de un pintor comunista en pleno centro del capitalismo burgués, el artista que crea para vivir pero que no vende sus cuadros, la de un luchador que ha abandonado el ring de la lucha, un creador que recrea el pasado en el mundo de hoy , compagina el recuerdo y el futuro, el dibujo figurativo y el abstracto... Pero el dibujo, las figuras centrales de la escena, habla sobre cómo es el acto de crear un cuadro -el sufrimiento, el análisis, las luchas internas, la indolencia o la obsesión alternativas del pintor, la decepción, el sudor, las alegrías, las tristezas...- Y el estudió filosófico de la vida y en concreto de la de ese exiliado, y de la política y del amor y desamor...se combina aqui para componer, minuciosamente, una muestra de como era el Londres de los años 50 del siglo pasado para un artista obsesionado con su pasado luchador antifascista y con sus lienzos.


Es un libro sobre pintura pero que va de la mano con la política. Janos vive de sus pinceles, ama sus pinturas y sus colores, existe por sus dibujos, pero en su mente, en su ser, es parte de él , brota el comunismo. Añora su juventud, se avergüenza de haber abandonado aquella lucha pero conserva aquellos valores, suspendidos entre la ilusión pasada y la decepción de cómo son las cosas ahora. La muerte de su amigo Lazlo le hará replantear todo lo que piensa... Podría pensarse, leyendo lo anterior, que el libro, en sí, envejece con las historias de la guerra fría de aquellos años del siglo XX, pero no, no es así, es un reflejo de un tiempo y una forma de vivir que debe quedarse entre escritos y hojas para que no se olvide nadie de cómo fueron y para qué. Nada puede esconderse de los ojos de la gente, y menos el pensamiento de las personas, la decisión personal de defender unas ideas vehementemente.

En la historia aparecen, también, una seria de personajes ajenos o adeptos a la “industria” del arte, a los que Berger fulmina o adora, desdeña o admira, con los que se va componiendo otra historia sobre personas, asuntos, “marrullerias” comerciales, desdeñosos “snobs”; todo un mundo de hombres y mujeres que rodean esa “industria” o aparecen aquellos que sólo admiran al artista tal y como es, que no esperan nada de él , sólo que los haga felices con sus dibujos, que admiran un cuadro o al autor por él mismo, no por lo que vende. Cuenta lo que se oculta entre los sumideros y los palacios sobre los creadores, corredores de arte, académicos, coleccionistas, galeristas y los descubre tal y como son, desnudos como cualquier maja de Goya .

No acertaría en definir con una palabra lo que me ha atraído de este libro, sólo una combinación de formas de contar, estilos de combinar, modos de enseñar a mirar o cómo compagina un diario con lo explicativo de una novela, lo abrupto y contradictorio del pensamiento de Janos, la aparición de una forma de poesía del color en precario equilibrio con la prosa dura y precisa de la realidad cotidiana, la sensación de estar sentado en una silla de la universidad oyendo una lección ejemplar sobre la relación entre literatura y la pintura; todas podrían explicar la razón por la cual me ha seducido este libro.


wineruda




domingo, enero 06, 2008

EN NADAR -DOS- PÁJAROS de Flann O'Brien


EN NADAR -DOS- PÁJAROS de Flann O'Brien
"at swim two birds" 1939
EDHASA 1989,295 PÁG.



Un estudiante de Dublín decide escribir una novela sobre las consecuencias de las malas acciones.Dicho libro tratará sobre un escritor -Trellis- que escribe libros que hablan de otros personajes que también cuentan historias o escriben novelas...novelas que hablarán, también, sobre esos primeros autores...Una multitud de voces, y puntos de vista, narrativas, que van entretejiendo una historia, donde lo "real-novelado" y lo "novelado-falso", se diluyen hasta confundir al lector en una suerte de truco de espejos literarios, donde no se sabe donde acaba lo supuestamente cierto y donde empieza "la mentira de la ficción".

Literatura en estado puro.

Una sátira, una comedia, una farsa, un truco de magia, un birlibriloque narrativo.. todo eso , y más, es esta novela.
Es un asunto serio intentar describir lo que es esta novela de novelas de novelas de novelas....
O'Brien juega con el lector y con la literatura, asume su condición (como escritor) de creador de verdades, de mago que convierte lo irreal en real, la mentira en verdad, lo falso en auténtico, lo novelado en verdadero, para confundirnos en su papel de dios sobre lo creado, lo muerto, lo contado y lo callado.

Literatura en estado puro.

Los personajes atacan al autor (perdió el control sobre ellos), lo agreden físicamente,, cambian su propia historia según sus necesidades, arrastran a sus propias historias a personajes de otras novelas, para integrarlos en sus vida o ,simplemente, como "actores a sueldo" de la literatura saltan de novela en novela al mejor postor. Encasillados en sus personajes de fantasía, sobreviven siendo atacados por los indios en medio de Dublín, o siendo policías que defienden a dichos indios emplumados de la maldad del vaquero de turno que ,sobre su caballo, cabalga entre el tráfico de la capital irlandesa.
Las historias nacen y se quedan, los personajes creados, sean míticos irlandeses que andaban con pasos de cien leguas, o sean diablos (pucas), o sean etéreos ángeles guardianes o sean rudos taberneros, o frágiles damiselas, se quedan en ese limbo de lo real, de lo real por nacido, sea por una pluma o por una idea: incorpóreos hijos de la imaginación.


Literatura en estado puro.

El surrealismo y el juego de los engaños se desparraman por toda la novela, creada, como no podía ser de otro modo, como si fuera un intento de novela, una copia primera , en la cual el autor habla ¿al lector o a si mismo?, de como deberán entenderse sus personajes,del nombre de las figuras retóricas, de las razones y las formas de las acciones, de cómo se debe mirar o entender o buscar la justificación ultima de lo narrado, . Así ese recurso tan supuestamente moderno de la metaficción recorre cada una de sus páginas, y no como recurso explicativo sino como recurso narrativo puesto que lo contado es cierto por el mismo hecho de haber sido escrito en esa novela que habla de esa otra novela que habla de esa otra....

Literatura en estado puro.

Flann O'Brien no deja que "en nadar dos pájaros" sea una mera exhibición de fuegos de artificio literarios, así sus personajes desbordan ironía, acidez , sorna, sentido del humor...y sus historias y sus diálogos desbordan críticas a todos los símbolos tradicionales irlandeses, sean literarios, o sean públicos : Iglesia, sociedad, política, -destroza con brutal ironía el amor al color verde de la bandera, como reflejo nacional de la sociedad irlandesa-, o sea el festivo hecho de beber, apostar... Nada queda en pie desde la visión de Flann O'Brien, sus historias me pareció que dejaban traslucir el cansancio sobre un modo de vida en la que se siente preso: en una vida acomodada y regida por normas: las católicas, el ritual de beber con los amigos, el amar a la patria y sus símbolos... Circulo que se cierra día tras día , sin escapatoria posible: lo tradicional es lo correcto por lo tanto lo correcto es lo tradicional; así la vida da vueltas y vueltas sobre un mismo sitio.Y sólo la literatura parece crear fantasmas, matar realidades y fundar ciudades nuevas sobre las ruinas de las ciudades vivas.



No creo que nadie que lea esta novela se quede impasible antes sus formas literarias, tampoco creo que el que lo haga encuentre lo mismo que he encontrado yo. Es más:creo que yo no encontraré lo mismo que he visto esta vez las siguientes veces que la lea, que sin duda lo haré. Pero,también, creo que nadie al que le guste la literatura podrá decir que es un lector completo, si no ha leído ""at swim two birds".

Yo la entendí como un paritorio de leyendas y fábulas, como una fuente de mil surtidores donde nace una historia de cada boca pero que mana para suministrar agua al mismo río que creo la fuente de los mil surtidores... en una suerte de eterno renacimiento, que no muerte.
Como una suerte de literatura de lo alegre, de humor ácido o dulce.
Como la pintura alegre de un descontento triste.
Como un libro a la espera que el lector aparezca dejando de lado lecturas clásicas, lineales, al uso. Si busca eso que no pase por sus páginas, no es lo que busca. Nada clásico aparece entre sus hojas.
Como una letanía de la fantasía: Literatura en estado puro

Hoy...

50 ESTADOS, 13 POETAS CONTEMPORÁNEOS de ESTADOS UNIDOS de EZEQUIEL ZAIDENWERG

  50 ESTADOS, 13 POETAS CONTEMPORÁNEOS de ESTADOS UNIDOS SELECCIÓN, TRADUCCIÓN Y PRÓLOGO DE EZEQUIEL ZAIDENWERG     Decían que decía...