PUERTO OSCURO de MARK STRAND
Editorial KRILLER71
Traducción. Adalber Salas Hernández
“Esta es la vida”, dijo, mientras alcanzaba la primera
De las muchas orillas del mar que buscaba, y se abrochó
El abrigo, y alzó el cuello y
comenzó a respirar.
Mientras buscas el origen de los versos, el latido inicial
de la vida de los poemas, como servidor de copas en viejos bares que enseñan lo
que fueron, y enseñan y muestran, en cada mancha, en cada rastro, incluso en cada
vaso roto, lo que serán. Mientras lo haces, como un viejo ermitaño que ha
salido de su cueva para ver el mundo, leo los versos de Strand, y veo que caen
como granizos que rompen como en el suelo, saltando mil pedazos de sus
escarchas. No sabes si Strand está dibujando el pasado o solo mostrando el
futuro. Leo, releo, vuelvo a leer sus poemas, intuyo su mirada, pero pienso que
da igual. Estos poemas son inmensas moles de piedra que solo son vencidas
por el lector, el escalador, cuando raja la montaña, para no caer de sus piedras, con tornillos
de hierro, cuando desnuda sus esquinas, para aferrarse, con las uñas sucias de polvo y agua, así son descubiertos sus poemas cuando pisas sus cimas y cuando destruyes sus nidos de
antiguas aves que anidaron allí.
Sus poemas son mis poemas, sus ideas son las mías, mis ideas
son suyas, son poemas para nacer y para morir. Son sus poemas que han nacido
para mí, sus ideas y las mías chocan, y
del enfrentamiento nacen nuevos poemas, descubres nuevos puentes, o descubres
viejas ideas que nacieron mucho antes de nacer nadie, descubres que la poesía de
Strand nace para él, pero lo hace para renacer en cada lectura; nacen , mueren…
sus poemas son oscuros, pero claros, claros como sus lunas que simbolizan la luz
que ilumina en la oscuridad, la luz en la noche… alumbrando… como sus poemas
Quedamos detenidos bajo la luna vacía y no escuchamos
Tañer cuerdas de arpa, ni habla pesarosa alguna
Que nos acerque a lo inalcanzable
…
Sí… los poemas son como lunas, como rayos de luna que alumbran
la oscuridad, no son soles no hay fulgurante claridad, solo ascuas que siembran
el papel de heridas y fuego fatuo y sombras, grandes sombras en las esquinas de
los versos que dejan ver resquicios de la verdad, o lo que debió ser verdad….
Son sus poemas como adagios de recuerdos, de pasados o de futuros
que llegaran para acabar; todo se acaba;
los poemas son finales, los principios quedaron lejos, los lugares comunes, que
creó el espíritu del poeta, quedan en la mente, en esos poemas que reviven las ascuas...esas ascuas….como
lo han sido antes, son recuerdos que vuelven. Son adagios con sonido metálico,
como con un metódico sonar de fraguas que golpean, como un remolino de
martillos que rompen el presente, porque será pasado o será futuro, pero el
presente no parece existir, se acabó en ese estruendo de voces pasadas y futuras.
Acabo de decir adiós a
un amigo
y me quedo mirando los
campos de maíz.
Están quemando los
rastrojos y el humo
forma una gaza sobre el rostro vacío del sol.
A un lado hay una fila
de álamos.
Y, más allá, alguien conduce un tractor.
¿Vive en aquella casita
blanca?
Alguien reproduce un
casete de pájaros cantando.
Alguien se durmió en una
furgoneta de nabos.
Pienso en las posibilidades
de la temporada.
¡Oh, pequeñas densidades
de blanco sobre blanco!
¡Oh, copo de nieve perdido
en los vestíbulos de abril!
Más allá de la tristeza-restaurantes
vacíos
Las calles vacías,
mínimas lámparas brillando
sobre el pueblo- solo
veo extensiones
de hielo y nieve, sobre
los pinos rectos, la luna frígida.
Un profesor
se sienta en su mesa y comienza a dictar su saber; el profesor, el buen
profesor el que no ha olvidado que sabe para enseñar, es el que muestra caminos,
veredas abiertas, puertas derrumbadas o contraseñas de pasos; el poeta, Strand,
no habla de caminos cortados, habla de todo lo que cabe en su mente, en ese
instante, en esa mirada, en ese paso de la idea por su vida, instantes de horas
o lugares que solo estará un minuto…Puertas de inicio, muelles donde partirá el futuro y donde ha fondeado, para siempre, el pasado.
...
Es cierto que, como
alguien ya ha dicho, en
un mundo sin cielo todo
es despedida.
Sin importar que agites
la mano o no
…
Strand habla,
o me habla, o descubre o sabe, que la
vida es un instante en la que las personas pasan y dejan su grito o su halo o
su despertar. En sus versos resuena la tristeza, ecos de momentos, sonidos viejos, imágenes, olores, saludos,
bromas viejas, echa de menos lugares que
han partido, deja pasar los caminos que sabe no va a alcanzar, deja llegar
algún presente que le queda en la mente, pero el futuro se dibuja oscuro…
...
...
La niebla se dispersa. Las
montañas mañaneras
se alinean más allá del
pueblo sosegado. El venado de patas ligeras baja al cementerio
Y las urracas llaman. Todo
está bien
…
La vida es un
discurrir de cosas que han venido desde el pasado, y se disipan en el futuro,
acaso no hay nada detrás de este adagio de timbres metálicos, en este discurrir
de ideas entre formas de opacas que surgen del cerebro del poeta y se desnudan
en el paso de las hojas o quizá, sea, en el discurrir del pasado del lector,
Strand mueve su vida alrededor de un mundo cerrado donde se acechan animales y hojas, o amores, o vidas vividas o por no vivir, se dispersan ideas que sabrá dios de dónde nacen, y van sembrando el discurrir del libro por los recuerdos, siempre recuerdos que cesaran cuando acabe el tiempo: hay padres, madres, hay olvidos, hay paisajes, hay vueltas, y revueltas, hay …
Strand mueve su vida alrededor de un mundo cerrado donde se acechan animales y hojas, o amores, o vidas vividas o por no vivir, se dispersan ideas que sabrá dios de dónde nacen, y van sembrando el discurrir del libro por los recuerdos, siempre recuerdos que cesaran cuando acabe el tiempo: hay padres, madres, hay olvidos, hay paisajes, hay vueltas, y revueltas, hay …
…pero en aquellos días
qué sabía yo de los placeres de la pérdida,
Del borde del abismo que
se acerca con su siseo
Y sus tormentas, un gran
animal acuoso quebrándose contra las rocas;
Esparciendo estrellas de
sal, nubes de espuma ruidosa
Nunca sabrás qué
has descubierto de él en sus poemas, no sabes si el camino que has recorrido,
donde los has encontrado es el centro de su universo o es el tuyo, pero sabrás
que has despejado caminos y despeñado piedras y obstáculos, sabrás que la Porción de Belleza que camina entre sus hojas
te alcanza como explosión de brusca apariencia,
casi cortante como un átomo de sabiduría perdido en la vida actual. Sabrás que
desde los lugares más recónditos del libro, salen recuerdos, los poemas son
recuerdos y anhelos, son los pasos de un poeta por la tierra en un instante en
un sitio. Solo sabrás que has perdido un camino y has descubierto otro..
El mundo
golpea los libros de poemas como un yunque, los versos están candentes y la vida
golpea con ese martillo que repite el
sonido repiqueante, nada sería igual sin la luz del fuego, de los poemas y de
las palabras…El futuro llegará, renqueante..
...
Estos son malos tiempos.
Idiotas han robado la luz de la luna.
Proyectan su pompa
sombría donde se les antoja.
….
Supongo que
se cierra el cielo, y la luz alumbra, la luz de la luna en la oscuridad, solo
para mostrar caminos que hubieran debido ser poemas. Y los lugares de partida no enseñan el camino solo enseñan el lugar a donde hemos llegado y del que vamos a partir, a ese lugar que desconocemos, a ese tiempo oscuro, a ese destino tan claro inefable como infalible.